Mostrando entradas con la etiqueta Reflexiones. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Reflexiones. Mostrar todas las entradas

martes, 31 de enero de 2023

lunes, 30 de noviembre de 2015

Recuerdos Constructivos.

Dentro de las vastas definiciones de memoria, me inclino hacia aquella que se nos ofrece desde al ámbito de la filosofía -vaya sorpresa poco sorprendente-, que califica la memoria como una de las potencias del alma. Claro que no estoy de acuerdo con todo el embrollo que envuelve la filosofía escolástica, pero me parece bastante atractiva la memoria como una de las fuerzas que nos impulsan, aunque a veces parezca totalmente lo contrario.

Usualmente sentimos los recuerdos como cadenas al pasado, puede que aquí yazca ese repudio inconsciente hacia las memorias y esa incapacidad de filtrar en base a etiquetas de BUENO o MALO, esas que tanto disfrutamos colocar en todo a nuestro paso. 

Yo he logrado hacer las pases con aquellos cortometrajes que se proyectan sin permiso y cuando menos se esperan; una tregua con aquellas imágenes, sonidos, olores, sensaciones, que se cuelan a través de los filtros desgastados del consciente y esos inexistentes del inconsciente. Me enfoco en lo impresionante de nuestras funciones cerebrales, y cómo luchar contra la memoria si se ha tatuado en casi todas las esquinas de ese órgano vital al que tenemos tan reguardado en su propia bóveda. 

La realidad que poco aceptamos es que las memorias nos brindan oportunidades de crecer. En el mejor de los casos, las memorias son la respuesta a todas esas veces que hemos deseado detener el tiempo, hacer un segundo eterno, y como simple mortales nos entendemos incapaces.  

Revivir un punto en nuestro trazo de vida no nos permite cambiar nada de lo ocurrido en ese preciso momento, pero nos brinda la ocasión de paralizar el reloj y reflexionar, disecar un hecho que quizás nos llevaría a entendernos un poquito mejor... con la falta que nos hace a veces quebrar un poquito esa cubierta complicada que nos recubre.

Dentro de las que creo interrogantes más comunes al revivir un instante, están las razones detrás de una acción y, de paso, la realidad de lo ocurrido contra la mejor versión de nosotros mismos -a personal favorite-; más que satisfactorio cuando ambos escenarios coinciden, siendo precisamente la idea de crecer en lo personal, lograr esa paridad con nuestro super-yo

Aclaro, no vivamos en el universo paralelo de nuestras memorias, no es el punto. Me inspiró la posibilidad de perfeccionarnos utilizando esos momentos en que no podemos evitar recordar. 

Como siempre, inconclusa, cierro esta entrada.

lunes, 13 de julio de 2015

Mutantes.

"Estoy totalmente seguro de lo que quiero y de lo que no quiero", es esa mentirilla que nos decimos todos dentro del rango de 'alguna vez' hasta 'a cada momento'; y me refiero a querer en todo el sentido del verbo, hablo de las elecciones, opciones, decisiones, del aspecto personal que se enfoca a nuestras vidas hasta el que se enfoca en los demás y lo externo. 

La realidad es que si lo pensamos a fondo, en el momento, no es una mentira, es simplemente nuestra verdad presente. Lo que somos/quienes somos en ese punto X donde corta la recta de una declaración de preferencia o deseo, no miente. Esas muchas veces en que nuestro yo presente encuentra a nuestro yo pasado bastante fuera de foco, se enaltece -sin sorpresa, como es de egocéntrico el yo- de lo mucho que ahora se conoce a sí mismo. Un ciclo. 

De acuerdo, dejaré de llamarlo mentira y lo ajustaré un poco, quizás ¿faltos de experiencia?, ¿faltos de vivencias?, ¿faltos de agua hervida que descubra lo que hay realmente bajo la coraza?... el punto es que, al fin y al cabo, 'FALTA' engloba gran parte de la idea. Falta de conocimiento en cuanto al tema que nos abarca a nosotros mismos en todo el esplendor de nuestra persona.

Foto: https://taniamarieartist.files.wordpress.com
¿Será la razón por la que nadie acabará nunca de conocernos, no tan siquiera nosotros mismos?

He iniciado ésta entrada aparentemente con la finalidad de perdonarme un poco por ciertas decisiones/acciones pasadas, no para excusar nada, más bien para hacer las paces con aquellas cosas. El punto de crecer, liderar revoluciones con fines importantes/valiosos, dirigir la embarcación a nuestro Norte y no simplemente al Norte, encontrar algo de paz mental y mirar atrás con la mayor cantidad de arrepentimientos posibles... okay, esto último quizás no tanto. 

En conclusión inconclusa, todos somos mutantes. Algunos mutaremos hasta la muerte otros se detienen en algún punto -¿deciden to get stuck in a moment?-. Esas pieles que perdemos a diario no son una mentira, son una parte de nosotros que hemos decidido dejar atrás. Y me disculpan, no intento compararnos con huevos ni serpientes, pero bueno... la verdad es que se ajusta, dentro de la idea de estar crudos y mudar de piel pues.

domingo, 21 de diciembre de 2014

Tallando en Piedra.

Bastante acertadas las palabras de Acción Poética: "El perdón no se le niega a nadie, pero la confianza no se recupera.", o al menos es bastante difícil recuperarla. 

Es una lección de esas que aprendemos con el tiempo, en base a fallar y a que nos fallen; es una de esas lecciones difíciles, sin importar de qué lado nos encontremos en cierto momento.  

Yo he fallado, he comprendido que mis acciones son más que capaces de afectar a otros, que hay que saber cuándo es correcto ser egoísta y cuándo dicho egoísmo nunca justificará tus acciones, que hay que estar conscientes de que el dolor que causemos a otros y a nosotros mismos, puede terminar destruyendo y destruyéndonos. 

Me han fallado, y me he percatado de que aunque duele, nunca dolerá más que fallar. Cuando te fallan, es como si una daga atravesara tu pecho; cuando fallas, te lo atraviesan dos. Al menos así lo siente mi pecho, el pecho de una consciencia latente.

La confianza es el mayor regalo que alguien puede brindarnos... pensemos, no dos sino tres veces, antes de dañarla. Reduzcamos el tallar sobre esa piedra, recordando que no hay goma de borrar ni CTRL+Z que valga, que cuando se talla en piedra hay que tener mano firme y que cometer errores podría deformar la obra, que todo en piedra es permanentemente. Puede que al final, no haya manera de recuperarla.

lunes, 6 de octubre de 2014

Caminos.

Admito que siempre me han gustado los poemas, canciones, pinturas y otros tipos de manifestaciones artísticas que se enfocan en los caminos. Quizás sea algo mío o sea algo que compartimos los seres humanos, esa debilidad con relación al futuro, con el qué nos depara la vida unos pasos más adelante y en base a las decisiones que tomamos a cada segundo. Pensamientos de ésta clase se pasean por las aceras de mi mente más seguido de lo que atrevería admitir.
Dentro de mis favoritos: el precioso poema de Antonio Machado, Caminante No Hay Camino de la obra “Campos de Castilla” (1912), siendo tan bien conocido en parte gracias a la voz de Joan Manuel Serrat y su canción Cantares, escrita en honor al poeta; y, por otro lado, el tan aclamado “The Road Not Taken” de Robert Frost. Hasta hace un tiempo, ambos simplemente me parecían lindas, llamativas e inspiradoras composiciones, dentro de la categoría del “recuerdo de vez en cuando”; mas estoy bastante consciente de que no es hasta que se viven ciertas experiencias que logra descubrirse el poder detrás de las palabras que se han leído y escuchado una y otra vez. Nuestras vivencias van dando forma a nuestros puntos de vista y, si tenemos suerte, modifican a manera de mejora nuestra capacidad de apreciar e interiorizar las cosas.
Mi porción favorita del poema de Machado es
Caminante, son tus huellas
el camino y nada más.
Me parece que es la oración determinante de todo el poema -además del título, claro está-, enfatizando el hecho de que no hay camino esperando por nosotros, sino que nos corresponde crearlo conforme a los pasos que decidamos tomar. Algo obvio en realidad, sin embargo son sólo palabras vacías hasta que se tiene la oportunidad de enfrentarse a ellas. Y hoy en día, y como muchos otros, me rodeo de este tipo de oportunidad: Descubro que hay opciones.

From: officialwhitehousepoet.blogspot.com
Durante el transcurso de nuestras vidas, somos sometidos a un sistema bastante básico: El sistema educativo. Desde pequeños se nos enseña que mientras cumplamos con los requisitos apropiados a cada grado, es imperativo que pasaremos al siguiente nivel; todo está pre-establecido bajo esa simple regla, haz y obtendrás. Dentro del sistema educativo no tenemos opciones, simplemente debemos cumplir con un número de materias para las cuales existe un programa ya determinado; así es desde nivel inicial hasta el nivel universitario. Aunque no lo sepamos cuando nos encontramos dentro del sistema, ésta es la parte fácil, todo está escrito, simplemente hay que seguir.
Dentro de éste sistema el “éxito” depende de si logramos cumplir o no con dichos requisitos, fuera de éste sistema “éxito” solo puedes definirlo tú. No hay patrones, ya no se trata de colorear dentro de las líneas, el mundo es una hoja en blanco que te corresponde dibujar; no hay un siguiente paso, nadie define lo que debes hacer mas que tú mismo. No más campo de fuerza o escudo protector, no más acciones con resultados predecibles; estás afuera y los interruptores ya no muestran qué encienden o qué apagan, ahora existes en un mundo sin señalización. Todo es un misterio, todo es un riesgo, ya nada está escrito.
¿Qué se siente?, ¿es una sensación liberadora o totalmente aterradora? Una buena pregunta para todos los graduados que ya han pasado la fase de “luna de miel”, no más togas ni birretes, no más felicitaciones ni brindis, no más institucionalización. Bienvenida realidad, donde nada te asegura que 2 + 2 serán cuatro, ni que obtendrás lo que crees que mereces por hacer todo lo que creíste era necesario. Bienvenida realidad, un espacio para valientes, un paraíso para las mentes con puertas abiertas, un lugar donde sólo sobreviven aquellos con sueños flexibles.
Me fascina la canción de Serrat que mencioné anteriormente, Cantares, es una pura representación cantada de lo que nos pasamos la vida haciendo los seres humanos: Caminos sobre la mar. En otras palabras, no somos más de lo que hacemos en el momento. Somos como las huellas o esas palabras que todos hemos escrito en la arena, pasajeras. Somos las pompas de jabón en la canción, nos pintamos de sol y grana, volamos bajo el cielo azul y, súbitamente, un día nos quebramos. Podrá sonar trágico, pero más trágico es el hecho de que -ya de manera literal- algunas pompas de jabón han vivido más fructuosamente que nosotros, porque desde que nacen están conscientes de su efímera existencia… a nosotros parece que se nos olvida a cada segundo.
Y a veces suele pasar, que sólo pretenda hablar de caminos, y mi mente termine desvariando. Sin duda a veces lo que sentimos se apodera de las manos y de la boca, logrando manifestarse en lo que decimos, escribimos y, en última instancia, todo lo que creamos. Me parece que deberíamos dejarlo pasar más a menudo. Es una práctica que evita la saturación neuronal, causa número dos de suicidio neuronal, superada sólo por el escuchar canciones de un género que nos desagrada.  Trust me, I’m a [still not practicing] Doctor. 
Ya dejando las bromas, éste es un fragmento de la serie Orange Is The New Black que se ha quedado dando vueltas en mi mente, y que hace eco de mi opinión sobre cómo a veces buscamos romantizarlo todo con el fin de olvidar por un momento lo insignificante que somos cuando nos comparamos con el universo y, al mismo tiempo, validar nuestras decisiones y convencernos de que estamos justo donde queríamos estar, haciendo justo lo que queríamos estar haciendo. Aunque, si nos ponemos a pensar un poco, no necesitaríamos tanta validación si estuviéramos tan seguros de que estamos exactamente donde queremos estar, haciendo lo que queremos hacer.
OITNB Robert Frost
Piper establece cómo el poema de Frost claramente describe que ambos caminos son iguales, llevando al escritor a elegir un camino al azar, mientras dice a todo el mundo que ha escogido el camino menos transitado, teniendo en mente validar su propia decisión ante sí mismo y ante los demás. Su punto es entonces demostrar cómo los seres humanos tenemos la necesidad de sentir/pensar que nuestras decisiones importan quizás un poco más de lo que en realidad importan, y sentir que hemos tomado el camino correcto, cuando en realidad todo está fuera de nuestro control y sujeto al azar.
Para concluir, es bueno recordar que la frase gastada que dice “lo importante no radica en llegar al destino, sino disfrutar del camino” está gastada por una razón: es cierta. Es cierta porque puede que nos quedemos a mitad de camino y nunca lleguemos a dicho destino, porque puede que el destino no fuera lo esperado y nos molestaría menos sabiendo que al menos disfrutamos el trayecto hasta allí.
También es bueno recordar que al final será insignificante aquel camino que tanto nos esforzamos en defender ante nosotros mismos y ante los demás… por lo que, VIVE y olvídate de justificar, LUCHA y asegúrate de que es lo que deseas en verdad. No te pierdas a ti mismo en la opinión de los demás, tu camino es tú camino, y el mismo se borrará contigo. 
P.D
Un shot por cada Más/Mas en la entrada. [Internal/public Joke-Drinking Game].
---
Originalmente publicado en: Bunches of Words - http://livingamateur.wordpress.com/ 

domingo, 3 de agosto de 2014

Llamada Despertadora.

Y es sin duda una realidad que, la mayor parte del tiempo, el ser humano necesita de un evento de gran magnitud para abrir los ojos ante la errónea manera de vivir que ha estado llevando. Una "llamada despertadora" que nunca fue programada, y que aunque volcara tu mundo de cabeza te das cuenta que, de cierta forma, la necesitabas.

Hoy brindo por aquellos efímeros momentos de claridad, aquellos que pensaron serían eternos y terminaron muriendo al final del día. Brindo por esos relámpagos de entendimiento, que desaparecieron junto a la tormenta que los produjo. Estos fueron visión de lo que sabía podía ser y vivir, solo que aún no era el momento. 

No quiero darle una pinta de molesta positividad a los eventos desafortunados, no quiero causar el tipo de incómoda sensación que esto provoca a algunas personas, sin embargo sí quiero afirmar que "No hay mal que por bien no venga"

Si encuentran un mal que no traiga nada positivo, por más mínimo que pueda parecer, entonces refuten ésta afirmación y a quienes la siguen repitiendo. A mis infortunios sigue aplicando, pues cuando no le busco la más mínima pizca de positividad, la misma siempre salta a la vista.

De todas formas, las cosas que aprendí de mis tantas malas experiencias acumuladas, lograron llenar un baúl que aún no transformaba mi estilo de vida; dichas enseñanzas se hicieron parte de mis días y de mi aún inmutable forma de vivir. Y es así, aprendes y sigues, hasta que sin esperarlo llega, ese vuelco a lo conocido, a lo rutinario, a tu desconectado día a día.

Lo recibí, sin entenderlo, sin que fuera justo, sin que me agradara para nada. Recibí malas noticias, una bala perdida, un rayo sin indicios de tormenta, un puñal por la espalda... todo así, medio narcoléptico, medio migraña sin aura.

Y al fin se ha hecho permanente, el entendimiento de que es mi deber hacer lo que siento, ser como quiero, abrir los ojos mientras pueda seguir haciéndolo, actuar, disfrutar del poco tiempo que me regalan en la tierra, estar consciente de lo breve de mi existir, hacer que valga la pena. Es momento de arriesgar y abrir mi corazón, sin alarmas contra incendio, contra robo; vivir sin miedos, que nada me frene o reprima. Solo ser. Priorizar. Al fin.

miércoles, 24 de julio de 2013

Hoy por mañana.

Creces, lo haces junto a un grupo variado de personas que pueden acompañarte durante solo una etapa o durante un gran periodo de tiempo.. Pero eso es lo de menos, no importa que tanto o tan poco alguien camine contigo, siempre ese alguien afecta tu vida de alguna manera, e incluso podría llegar a encontrar en ti cosas que quizás nadie en una vida descubriría.

Mi día no empieza temprano hoy, más empieza lo suficientemente temprano para sentirme tan tan alegre por la oportunidad de leer la corta y plena publicación de un viejo amigo.. Él sencillamente escribe "Hace mucho tuve un sueño.. Ser quien soy hoy en día.. Feeling happy =)". Pues quizás esta sea una publicación cualquiera, muchos escriben este tipo de status cada tres segundos; sin embargo me ha llamado la atención, me ha hecho sentirme muy feliz por mi amigo, porque cuántos podemos sinceramente escribir lo mismo?. 

Nunca he temido admitir que no estoy ni cerca de ser quien he soñado ser; tampoco temo admitir que es totalmente mi culpa lo lejos que estoy. A veces sentimos que nuestras aspiraciones son muy hardcore, que quizás en toda una vida no podremos alcanzarlas..la verdad es una sensación que me acompaña muy seguido, mas mi amigo me ha hecho pensar en lo mucho que he dejado de trabajar para ser la persona de mi sueños. Hace tiempo que me he fijado en el momento correcto para empezar, en el momento correcto para decir que tengo los medios para ser y encaminarme en esa dirección.. Pero y mientras? Al parecer eso de estar en un limbo existencial sale barato, porque muchos nos refugiamos en el observar lo bello y lo trágico del mundo, en apreciarlo, todo mientras esperamos llegar al punto "correcto", a la parada "correcta" donde nos toca empezar a ser la persona que soñamos seríamos.. =\ 

Gracias querido amigo, porque con tu valiosa realización has tocado un componente importante de mi vida.. Espero poder llegar a decir lo mismo algún día.

No se crece en un segundo..

Y me atormentan estas líneas de Drexler "Se es lo que se es, lo que siempre se ha sido..", pues cierto, lo que pasa es que a veces nos escondemos demasiado bien.. 


"Y nos damos cuenta a veces, que corremos en nuestras mentes, que nuestros pies [verdaderamente] no se mueven". - V.