domingo, 26 de julio de 2020

Sencilla.

Leyendo poesía que me enlazó a otras poesías, así me encontré con estas líneas.
Sentí una necesidad el compartirlas. Un poema sencillo pero significativo.


COMO TÚ
Así es mi vida,
piedra,
como tú. Como tú,
piedra pequeña;
como tú,
piedra ligera;
como tú,
canto que ruedas
por las calzadas
y por las veredas;
como tú,
guijarro humilde de las carreteras;
como tú,
que en días de tormenta
te hundes
en el cieno de la tierra
y luego
centelleas 
bajo los cascos
y bajo las ruedas;
como tú, que no has servido
para ser ni piedra
de una lonja,
ni piedra de una audiencia,
ni piedra de un palacio,
ni piedra de una iglesia;
como tú,
piedra aventurera;
como tú,
que tal vez estás hecha
sólo para una honda,
piedra pequeña
y ligera…
     (León Felipe, Versos y Oraciones de Caminante)

Para tí en el día del Padre.

Pa,

No estoy segura que estas líneas sean para ti,
pero aquí están.
No eres tú, soy yo.
Mi naturaleza sigue buscando un molde,
con toda inseguridad de querer encontrarlo,
con toda certeza que es una improbabilidad.

Y ahora mismo soy así,
como una brisa
que aparece de la nada
en ninguna fecha especial,
que se materializa en días cualquiera 
cuando nadie la espera.
Una sinvergüenza,
que no llega solo por tener meses sin verte
sino por la sed de necesitarte,
porque así es quererte.

Esta alma es como un cactus,
requiere pocas atenciones
y se pudre,
se ahoga en la abundancia.
Creció en condiciones desérticas
y ya desconoce otra forma de vida.
Y ahí está,
indescifrable pero presente,
y a veces se acuerda 
que quiere verte.


V.