domingo, 16 de agosto de 2009

Y todo es otra cosa.


Las relaciones interpersonales podrían fácilmente compararse con una paleta de colores de esas de la ferretería, y es que son tan cambiantes que si no miramos con atención podríamos fácilmente perder el punto en el que todo pasó de Blanco a Gris y eventualmente de Gris a Negro.

Es cierto que en una relación todo es parcial, no tenemos total control y no podemos anticipar ni planificar las reacciones, deseos y acciones de la otra persona, lo que es realmente parte de la gracia de la situación, pero es también cierto que es responsabilidad propia medir nuestras acciones, deseos y reacciones, con el simple fin de convivir, nunca para cohibir o reprimir nuestro ser, ni cambiarnos por la comodidad del otro, mucho menos restarnos importancia; esto lo aprendí recientemente.

Toda mi vida he considerado a las personas que me rodean , con las que me relaciono, como seres sumamente importantes y especiales y así he intentado siempre tratarlos, la mayor parte del tiempo poniendo sus intereses ante los mios, sacrificando mis deseos y preferencias por su bienestar...y la verdad, siempre me hizo sentir bien, siempre supe que así tenian que ser las cosas, así actuan las grandes personas...todo esto hasta un momento que me hizo notar que algunas cosas no andaban bien.

Cuando actuas de este modo, no esperas recompensa ni gloria, no esperas nada, nada que no sea quizás un poco de esta misma consideración que tan abiertamente regalas, un trato parecido. Y realmente no te duele tanto no recibirlo de cualquier persona con la que mantienes una relación no muy profunda, es más bien cuando descubres que alguien de antes, alguien de siempre, alguien de tí, usa esta cualidad tuya, esta forma de ser de tal manera que te sientes exprimido, reducido, menospreciado, poco importante...

Y duele más cuando quieres consolarte pensando que tálves esa persona no está consciente de tu sentir, de como te trata, y NO puedes, no puedes sin tildarla de insensible o desconsiderada, lo que es peor, de mal amig@...y es precisamente cuando estás parado en este momento cuando te preguntas...Cuándo pasó esto?, Cuándo empezaste a sentir de este modo y no dijiste nada?, Cómo de un momento a otro estás parado en Negro?....Cómo te encuentras en lo que podría ser el fin?

Y al fin y al cabo ya se que no todo es como queremos, ni lo que esperamos que sea, "la vida es otra cosa", las personas actuan a su voluntad, las monedas tienen dos caras, , cada cabeza es un mundo, no hay dos reflejos iguales en un espejo, existen infinitas formas de hacer una misma cosa, y todo depende del ojo con que se mire...

Algo que sí se es que nunca pretenderé ser selectiva, seguiré dando lo mejor de mí en cada una de mis relaciones, no permitiré que nada eclipse mi manera de ser, pero abriré los ojos a las malas intenciones y mi mundo ya no será enteramente fantasioso...Guardaré mi Utopía [de ♥ sinceros y de servicio] lejos del resto del mundo, solo para esas personas que también buscan ser mejores, que me han desmostrado que vale la pena, a los que Amo por el simple hecho de ser como son.


[Momento de tristes recuerdos]
V

viernes, 14 de agosto de 2009

Randomly Speaking.


Desnudándose con la lentitud del internet más malo del planeta, mi corazón, intenta poco a poco dejar de esconderse tras mil cortinas de tela gruesa.

No intenta despojarse de su independencia, ni de la terquedad que lo caracteriza, solo trata de hacerse más asequible y comprensivo.

Nunca podrá hacerse ciego ante las injusticias, más pretende bajarle el volumen a la severidad de su juicio, entender, antes de creer.

Más que nada, pretende ir poco a poco dejando valiosos trozos de sí mismo en otros corazones, y entregar su último trozo antes de partir, no quiere llevarse nada de sí al morir.

Pero para eso, sabe que tiene que modificar aquellas cosas en las que aún falla, sin importar lo largo que pueda ser el proceso.

No pasar a la siguiente página sin entender completamente la actual, estar en más de un lugar al mismo tiempo sin perder la concentración, priorizar para evitar perder tiempo.

Dejar de sufrir por intentos fallidos, al querer salvar lo que no quiere ser salvado, cambiar lo que no quiere ser cambiado...aprender a dejar ser y aceptarlo.

Aceptar que no tiene el control de todo, algo difícil para el pendejo, pero no hay mayor verdad...aún así, nunca conformarse.

Mi corazón no persigue grandiosas ambiciones, pero para el son invaluables y de marcada importancia...No quiere guardar amor, ni coleccionar te quiero's...

Ni dejar miles de cajas con palabras archivadas, besos y abrazos escondidos que nunca llegaron a su destino...

Es así como las cosas simples son las que dan a todo sentido...