La única canción que se puede dar el lujo de ser llamada "Aquella que me ha hecho no querer escucharla", porque hoy logra lo que pocas...rasgarme el alma, destrozar los pedazos y pinchar 10,000 veces mi anticoagulado corazón...colador inútil.
¿Las razones?...Son demasiadas, pero por el momento solo unas tres importan...y como siempre me tambaleo en la superficialidad...aún así duelen, desequilibran y se sienten como que competía en una justa y me distraje...sirva mi cuerpo de evidencia.
Tanto sentido, tan perdida, obnubilada...que mi falta de esfuerzo hable por mi, a veces damos mucho por sentado. Sentirme sobrante cuando estuve tan involucrada fue el peor de los engaños para desviar mi atención y mirar de cerca el fracaso. Poner lo importante en segundo plano es siempre el desencadenante de una explosión. Somos sorprendidos por los restos, que hacen dudar de la eternidad.
Que el día nublado ciegue solo tus ojos, porque aunque creas que no, te afecta, peor aún...te cambia.
Y aunque la patología demuestre lo contrario, quizás en este caso, será mejor que estas heridas estén anticoaguladas y no fibrosadas...
~ Warren Barfield - Love is not a fight
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